miércoles, 29 de abril de 2009

El sevillano de Badoo (relato erótico)



Hace algún tiempo me suscribí a un página llamada Badoo en la que se puede encontrar todo tipo de gente. Hay para todo los gustos. En principio me registré para pasar el tiempo y conocer gente. Tiene un buscador para hacer fácil tu búsqueda, así encuentras rápidamente el tipo de gente que deseas conocer. Ves sus perfiles y algo de sus preferencias escritas por cada uno de ellos. Vi uno que me llamó realmente la atención por sus fotos. Tengo debilidad por los chicos aventureros y de deportes extremos, pero este tenía lago más que lo hacía especial.

En las conversiones iniciales con el sevillano de Badoo me di cuenta que era muy diferente a lo que ya había visto allí. Intercambiamos MSN nos hemos hecho muy buenos amigos y confidentes y, por que no decirlo, en cierto modo buenos "amantes". Nunca nos lo propusimos, pero nuestras conversiones subían de tono sin poder evitarlo. Ya tenemos cerca de seis meses chatiando. En una de esas charlas subidas de tono me preguntó que me gustaría hacer si él estuviera aquí conmigo. Viendo una foto muy sexy que él me pasó comienzo a decirle lo que he pensado hacer. Le sorprende lo pícara que soy e insiste en que le cuente, que le de más detalles y no me hago de rogar.

- En mi soledad, tu foto es para llenar de vida mi habitación que por momentos se va colmando de palabras, que regresan a mi memoria, de conversiones nuestras y dan calor a mi piel, a ese rincón entre mis piernas que esta noche llora al desearte. Son lagrimas que caen como gotas de aquafina al principio, pero conforme tu presencia se hace más tangible entre mis sabanas se convierte en una tormenta que inmunda la intimidad de mi ser...

- La punta de mis dedos recorren suavemente la aureola de mis pronunciados pezones. De manera incontrolable mi dedo índice se escapa de mis senos resbalando por mi vientre sensualmente de camino al Monte de Venus. Llega en el momento justo en que todo palpita a pesar de tu ausencia. Toda mi mano se mueve sobre mi clítoris húmedo y deseoso de ti. Cierro los ojos para sentir con más fuerza este momento, para sentirte... entonces desparece tu ausencia.

- Ya estas aquí en mi cama desnudo, con tu piel suave y tu olor embriagador... Esta noche estás diferente, no como siempre, tu mirada es salvaje y tu cuerpo muestra toda su fuerza. Está como a mi me gusta. Sabes como me gusta que seas un "poco malo" y esta noche tus ojos revelan tus intenciones.

"Voy comerte cada parte de tu cuerpo" me dices.


- Tus palabras llagan a mis oídos mientras muerdes con suavidad mi cuello.


"Así, así, así... más fuerte quizá" me susurras. Mientras lo haces te pido que lo hagas más fuertes, que no tengas miedo de hacerme daño, sabes que eso es lo que yo quiero.


- Tus dientes se clavan con fuerza haciéndome gritar por esa mezcla de entre dolor y placer. Sin más penetras dentro de mi vagina caliente provocándome un nuevo grito. Estás encima de mí. Me agarras por el cabello con tus manos fuertes y me susurras al oído.


"Si, verdad así es como te gusta sin que los esperes.. Así te gusta sentirla, dura, muy dura... vaya que si te gusta, que mojada estas......... que suave, que rico y que rica estas"


- Sus palabras golpean con firmeza en mi mente subiendo el nivel de excitación. Cada palabra, cada penetración es acompañada por tus gemidos, por tu respiración que se acelera a cada segundo.


"Quiero que me forcejees, no dejes de hacerlo, no pares" se me escapa como un susurro.
- Intentando quitarte de encima de mi me suelto una mano y tu me la agarras de nuevo. Tus movimientos son más fuertes, por mucho que yo luche se quien tienes la batalla ganada... cuestión de fuerza... la batalla es mía...
"OH, si, no pares uuuffff... no pares uuuuuuuummmmmm... así métemela con más fuerza... más fuerte!... me encanta... ahh, no puedo más... me voy, me voy... córrete conmigo" le digo.


- Así entre la excitacíon, el calor y la pasión del momento llegamos los dos al clímax. Solo quedan los agitados sonidos de muestra respiración.


Lo sorprendí con mi relato y me dijo: "Joder como me has puesto... uuuufff... que cabrona que eres, me gusta que me hables así "... Todo este placer me lo hace sentir tu foto y mi imaginación en la soledad de mi habitación... pero que bien nos ha hecho sentirnos hoy, parecía tan real... Tu respuesta me dejó peor: "Pronto lo será, pronto será real"...


Ya tenemos fecha para nuestro primer encuentro, estoy deseosa de que llegue pronto esa día y se los contaré con lujo de detalles.